El brutal KO que recibió Matthysse Jr. que lo mandó al hospital

El boxeo suele entregar escenas angustiantes, preocupantes. Este viernes ocurrió una vez más, en La Calera, Córdoba. Peleaban Franco Morello y Walter Ezequiel Matthysse, hermano menor del conocido Lucas, uno de los pugilistas argentinos más importantes del momento. Y la confrontación terminó en un KO de los más feos.

En el segundo round, sobre un cuadrilátero alrededor del cual no había espectadores, ambos boxeadores combatían durísimamente, con muchos golpes de cada lado. Incluso Matthysse tuvo a maltraer a Morello, a punto de hacerlo tambalear. Pero pocos segundos después, éste devolvió con un impacto que dejó flameando por un instante a su adversario y en seguida fue a rematarlo: con otro derechazo derribó a Matthysse, que inquietantemente quedó con la mirada perdida.

El KO a Matthysse que preocupó a todos

No estaba nada bien el peleador noqueado, a punto tal que los asistentes se apuraron para arrojarle agua a la cara y quitarle los guantes y las botas, mientras empezaban a trabajar los paramédicos. Pronto le colocaron a Matthysse un collar de Filadelfia y se lo llevaron en una camilla, afortunadamente ya con el pugilista consciente y moviendo controladamente sus brazos. Antes de que lo retiraran, pero luego de festejar efusivamente su KO, Morello se preocupó por su salud y lo acompañó durante algunos segundos.

Paradójicamente, Matthysse venía de pelear seis días atrás, y de noquear en el primer round. Por reglamento, en general deben transcurrir al menos doce días entre un combate y el siguiente, pero ese lapso mínimo se reduce a una mitad cuando el boxeador en cuestión gana antes de que concluya el tercer parcial de la primera pelea y siempre que el supervisor, fiscal o médico de guardia no presente un informe de castigo intenso al boxeador pese a la victoria.