Caso Melián: descargo del promotor y cita con el tribunal de disciplina
Parecía que el esperado duelo entre Alberto Melián y Andrés Sosa iba a ser una fiesta para los fanáticos del boxeo. Después de una licitación, idas y vueltas entre los promotores, disconformidad de Melián por viejas diferencias con la promoción con Tello Box y Sampson Boxing, habían puesto en jaque al evento.
Un día antes, con todo listo para el pesaje televisado en San Pedro –a donde se había trasladado el evento por pedido de Melián, que no quería ir a Córdoba- la noticia dejó a todos “impactados”: el doble olímpico se habría descompuesto el día previo, y ahora decidía no pelear. Lo único que se sabía provenía del posteo de una cuenta no oficial de Twitter del “Bochin Club” donde ya a las 17:00 hs del día anterior anticipaban que Melián no pelearía.
El evento se realizó igual, con Sosa venciendo por KO en el tercer round al suplente Jeremías Ulibarre y dedicándole el triunfo al propio Melián que lo miraba por TV. El rincón de Sosa se acordó de Melián en términos picantes y en la dedicatoria a la cámara quedó claro. La frustración era evidente porque ni él, ni la TV, ni los sponsors, ni el público tuvieron el combate que esperaban y esto se tradujo en un cambio de condiciones y una gran pérdida de dinero para los organizadores.
Recién esta semana se supo de Melián, quién en su cuenta de Twitter se quejó por los comentarios del periodismo. Por su parte, Tello Box dirigió una nota a la FAB y al público en general donde manifiesta su versión de los hechos y exige la intervención de la FAB. “Del lado de Melián todavía no presentaron los informes médicos justificando su ausencia. Su promotor Mario Margossian se comprometió a entregarlos mañana. Cuando esta documentación y la versión de Melián estén en poder del Tribunal de disciplina, este los analizará y se expedirá. Calculamos que será la semana que viene”, comentó Hernán Salvo, directivo de la FAB.
En algo coincidieron todas las partes: el propio Melián, su entorno, la FAB y Tello Box: lo primero y más importante es la salud del boxeador. Lo que ahora está en la mira es si se cumplieron o no los procedimientos y las responsabilidades con quienes organizan, invierten y trabajan para que haya boxeo. Pero sobre todo, con los seguidores del “más noble de los deportes”.