La hija de Tyson Fury sale de cuidados intensivos, pero su pelea con Deontay Wilder peligra

Tyson Fury tuvo que lidiar con una de las peleas más importantes de su vida. Su hija recién nacida, Athena, salió de cuidados intensivos luego de tener complicaciones en su nacimiento el pasado 8 de agosto.

El Gypsy King publicó un video en su cuenta de Twitter en el que agradeció la atención y ayuda de los médicos que permitieron que la salud de su hija fuera mejorando con el paso de los días. “Gracias a Dios, gracias a todos los médicos y enfermeras que la ayudaron”.

Aunque la situación mejoró, el padre de Tyson, John Fury fue claro al asegurar que la principal prioridad de su hijo es la salud de su pequeña y que la pelea ante Deontay Wilder podría quedar cancelada.

“Nadie puede esperar que se llevara a cabo un combate de boxeo en momentos como este. La familia es la familia, los negocios son los negocios y el deporte es el deporte, pero la familia es lo primero y más importante. Si eres un hombre de familia que está feliz y que sabe que todo está bien en casa, entonces puedes combatir esa noche”, dijo para BT Sports.

El combate que está pactado para el 9 de octubre no es un hecho y John mencionó que si la situación de su nieta no mejora no habrá tal pelea y menos sin el entrenamiento adecuado.

“Soy su padre y él está en esta situación y si los problemas persisten, cancelaremos la pelea, cancelaré el combate. Pero queremos pelear contra Wilder, así que, con suerte, Tyson, podrá llevar pronto a su hija a casa. Si todo va bien, con suerte comenzamos el campamento el 14 o 15 (de agosto). Pero si no, es sólo un combate de boxeo y se puede esperar”.