De la Hoya explica que su regreso al boxeo le ha permitido evitar malas rutinas

A sus 48 años, Óscar de la Hoya volverá al ring en una pelea profesional ante el peleador de artes marciales mixtas Vitor Belfort el 11 de septiembre en el Staples Center, edificio de Los Ángeles que tiene una estatua del “Golden Boy” en la entrada principal.

Para promocionar la contienda, De la Hoya (39-6, 30 KOs) hizo una sesión pública de entrenamiento el martes pasado, aunque pocos aficionados asistieron. A pesar de que no ha peleado desde 2008 cuando perdió ante Pacquiao, De la Hoya se vio en forma para asumir este compromiso que muy pocos le aconsejan a su edad.

El oriundo del Este de Los Ángeles, al hablar de su regreso al pugilismo, ha expresado consistentemente que lo hace “por él mismo”, aunque suena aún más sincero cuando se trata de hablar de la disciplina que ha tenido que adoptar al asumir este reto.

“Yo siempre he tenido disciplina cuando boxeo. Fuera del cuadrilátero, cuando no estaba peleando, no tenía disciplina, tomando, haciendo pende… el boxeo me da energía, me da las ganas para vivir”, indicó De la Hoya a Los Angeles Times en Español.

“Realmente el boxeo es lo que me salva la vida, es lo que siento. Entrenando y boxeando me siento como nunca, me siento increíble. Despertando a las 4:30 a.m…. antes era al revés, me dormía a las 5:30 a.m. así que esta vida que tengo ahorita, no la cambio por nada”, expresó el medallista de oro en Barcelona 1992, quien en el entrenamiento público en LA Live estuvo acompañado de su hermano y su papá.

De la Hoya dijo que ha estado entrenando desde hace mucho, incluso antes de anunciarse la pelea.

“Es un estilo de vida. El boxeo realmente me salvó la vida”, indicó De la Hoya. “El camino que estaba tomando, no iba a un lugar bueno”.

De la Hoya también descartó que esté haciendo este regreso por el dinero.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *