King Kong Ortiz: El boxeador amateur que se volvió profesional por la enfermedad de su hija

Luis Ortiz, uno de los boxeadores más destacados de Cuba en los últimos años, volverá a pelear pese a que tiene 43 años de edad y su principal motivación es su hija, quien lucha contra una enfermedad rara y que no tiene cura.

El King Kong, como se le conoce en el box, subirá al cuadrilátero este domingo cuando enfrente al mexicano Andy Ruiz, un rival que no será nada sencillo.

Luis Ortiz ha tenido varios combates en su vida, pero el más difícil ha sido la lucha que enfrenta junto con su hija, quien padece epidermólisis ampollosa, una enfermedad que no conoce cura.

Luis Ortiz ha tenido varios combates en su vida, pero el más difícil ha sido la lucha que enfrenta junto con su hija, quien padece epidermólisis ampollosa, una enfermedad que no conoce cura.

Luis Ortiz se dio a conocer cuando peleó por primera vez como profesional en Estados Unidos a los 30 años, poco después de llegar de Cuba, luego de que hiciera un viaje de 12 horas a México, para cruzar descalzo la frontera y conseguir el sueño americano.

Convertirse en boxeador profesional fue uno de los objetivos que se propuso el King Kong y lo hizo por su hija, Lismercedes, quien sufre epidermólisis ampollosa y es controlada por medicinas especiales.

Luis Ortiz inició en el boxeo profesional muy tarde, aunque como peleador amateur tuvo un récord de 343 victorias y 19 victorias, lo que le ayudó para poder ser un profesional y buscar el dinero para mejorar la vida de su hija.

Asimismo, Otiz ha estado presente en las campañas para combatir esta enfermedad tan terrible que padece su hija.

Como profesional, King Kong tiene un récord de 33-2 y buscará derrotar a Andy Ruiz este domingo en el El Crypto.com Arena de Los Ángeles.