El día que Mike Tyson le prometió una venganza a Muhammad Ali con 14 años… ¡y cumplió!

En el ocaso de su carrera deportiva Muhammad Ali se enfrentó a Larry Holmes. Sus mejores momentos habían pasado; la medalla olímpica en Roma, la trilogía con Joe Frazier, la “Rumble in the Jungle” con George Foreman en Kinsasha, la paliza a Floyd Patterson preguntándole en cada golpe “¿Cómo me llamo?”, haber dejado su nombre esclavo (Cassius Clay) por un nombre libre, haberse negado a ir a la Guerra en Vietnam, haber luchado continuamente contra el racismo, y ver truncada su amistad con Malcom X.

Muhammad Ali vs. Larry Holmes

El 2 de octubre de 1980 Muhammad Alí, de 38 años, subió al ring del Caesar Palace de Las Vegas; sería la anteúltima pelea de su carrera. El rival era un viejo conocido, había sido sparring suyo: Larry Holmes, de 30 años, que llegaba invicto en 35 peleas y con una condición física muy superior al campeón. Alí ostentaba los títulos pesados The Ring y el del Consejo Mundial de Boxeo (WBC) y quedaron en manos de Holmes cuando ya no quiso salir al décimo round; el castigo había sido mucho. Y, a ojos de los espectadores, sobre todo los de un niño de 14 años presente en el estadio, el maltrato hacia el campeón había sido innecesario. Ese niño era Mike Tyson y estaba acompañado por Cus D´amato, su tutor y entrenador.

La carrera boxística de Ali estaba a punto de terminarse, sólo faltaba un último capítulo igual de apático: Drama in the Bahamas, en Nassau ante el canadiense Trevor Berbick. Fue derrota por decisión unánime en diciembre de 1981. En cambio la de Larry “The Easton Assassin” Holmes en pleno ascenso. Defendería su invicto doce veces más antes de caer dos veces ante Michael Spinks, el 12 de septiembre de 1985 y el 19 de abril de 1986. Y prolongaría su carrera hasta 2002.

 

La promesa de un joven Mike Tyson a Muhammad Ali

“Cuando manejamos a casa en Catskill (volviendo de la pelea), nadie en el auto dijo una palabra, todos estábamos muy molestos”, contó Mike Tyson. Pero D´amato le tenía preparada otra sorpresa a su pupilo, una llamada telefónica con su ídolo, en la que, según Iron Mike, le dijo: “Cuando sea mayor, pelearé con Holmes y lo traeré de vuelta por ti”.

Mike Tyson vs. Larry Homes

Larry Holmes había anunciado su retiro luego de la doble caída ante Spinks. Pero llegó a un acuerdo con Don King por una buena suma de dinero y la posibilidad de volver a coronarse como campeón del mundo.

Llegó el momento para que aquel niño cumpla con su palabra, su ídolo subió al ring con él el 22 de enero de 1988 en el Cetro de Convenciones de Atlantic City, Nueva Jersey. Como si Tyson necesitase de la aprobación de Ali, estuvo presente en el combate ante Holmes y algo le pidió antes del inicio del combate, Tyson asintió con la cabeza. 

Algo se repitió de aquella pelea en 1980. Ahora Holmes era el tenía 38 años y un rival muy menor y tanto más potente que también llegaba invicto la pelea: Tyson contaba con 21 años, 33 peleas ganadas y 29 por KO. 

La paliza fue de antología, sobre el final del cuarto asalto Larry Holmes cayó desplomado por tercera vez y el juez Joe Cortéz paró inmediatamente el combate. Tyson había ganado por demolición y había consumado la venganza prometida a Muhammad Ali.

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