Diego De La Hoya quiere robarse el show en Vargas-Kameda
El mexicalense Diego de la Hoya no sólo pretende derrotar con autoridad a Ronny Ríos este sábado en California, también quiere robarse el show a los protagonistas de la cartelera de Golden Boy Promotions, Rey Vargas y Tomoki Kameda, con el afán de dar un golpe de autoridad y dejar en claro que está listo para ir por un campeonato del mundo.
En charla con ESPN, a sólo unos días de su regreso al ring, el primo de Óscar de la Hoya aseguró que la gente verá en el ring a un Diego hambriento con ganas de trascender, ya que el mes pasado cumplió un año sin victoria tras el No Contest de abril pasado. Diego llegará a la pelea con marca de 21-0 y 10 nocauts por 30-3 y 14 nocauts de Ronny.
“Mucha gente en Mexicali dice que es mi turno, que ya lograron sus sueños Andy Ruiz y Elwin Soto,y que ahora me toca, quiero seguir esa buena racha para el boxeo de mi tierra”, dijo Diego en la charla. “Y por los estilos, yo creo que nos vamos a robar la noche, me puedo robarla noche, va a ser una gran pelea con Ronny, sabemos lo que trae a la mesa y la idea es no dejar que él imponga su plan de trabajo sino ejecutar el nuestro”, apuntó.
Si bien la pelea le dejará como contendiente directo al cetro de la Asociación Mundial de Boxeo, actualmente en poder de Daniel Román, no quiere Diego perder de vista a nadie y sabe que la pelea de Rey Vargas con Tomoki Kameda por la faja del Consejo Mundial de Boxeo también podría marcar su futuro en el boxeo.
“Claro, estamos enfocados en Ronny Ríos pero sin perder de vista a Vargas y Kameda, es la división donde estamos y en un futuro puede surgir algo, pero yo en lo mío, estamos a dos o tres libras del peso, contentos por el trabajo y muy motivados porque sabemos que si ganamos vamos por el campeonato. Así que he tomado esto como una gran prueba y quiero demostrarle a la gente que estoy listo, que vean mis cualidades”, apuntó Diego.
Sobre su reciente pelea ante Enrique Bernache, que acabó tras un cabezazo apenas en el segundo asalto para un No Contest, dijo que simplemente alimentó su ansiedad por volver al ring y demostrar que está listo para el título. “Me decepcioné en el momento, entrené muy duro para acabar así, pero son cosas que pasan, no hubiera querido ese final, pero aprendimos, regresamos con más ganas al gimnasio y trabajamos aún más duro para esta pelea”, sentenció el mexicalense de 24 años.
Por Salvador Rodríguez | ESPN Digital