Boxeo argentino: un año para olvidar
Por Carlos Irusta – ESPN
El boxeo argentino no venía demasiado bien. Y, encima, llegó el Covid-19, que paralizó al país. Por supuesto, esto afectó a toda la actividad nacional y el boxeo no quedó afuera, ni mucho menos.
Se anunciaba la realización del pre olímpico para Tokio en Buenos Aires, cuando la actividad fue suspendida. Tras el anuncio oficial –creemos que fue la primera actividad pública deportiva en ser cancelada- llegó la orden de cuarentena y todo se congeló hasta octubre, cuando casi en puntas de pie, el boxeo volvió a la actividad.
Fue a través del promotor Mario Margossian -titular de Argentina Boxing Promotions- que se efectuó la primera reunión profesional oficial el 30 de octubre. El campeón sudamericano y latino crucero WBC, Yamil Peralta, derrotó por puntos a Marcos “El Comandante” Karalitzky y defendió por primera ocasión su corona sudamericana de los cruceros. Fue en el Complejo Deportivo del Club Atlético, Social y Deportivo Camioneros, en Luis Guillón, provincia de Buenos Aires. Peralta suma 8 triunfos con 3 antes del límite.
Margossian –distinguido durante casi diez años seguidos como el Promotor Latino del Año en la WBO-, hombre que suele sentir que no es totalmente reconocido por la prensa especializada, fue el organizador del primer espectáculo profesional oficial de la FAB.
También hubo actividad paralela, no reconocida por la Federación Argentina de Box. Este tema –el de la práctica del boxeo no registrado por la FAB- no se agota: crece, puesto que aunque la FAB dice regir totalmente los destinos del boxeo argentino, los festivales paralelos siguen aumentando. Y no sólo eso, porque algunas entidades como la WPC, otorga permisos para pelear en el extranjero. Asi Damián Bonelli, con 42 años y 7 peleas perdidas en forma consecutiva, viajó a Miami y le quitó el invicto a Derrieck Cuevas (23-1-1). El humilde vendedor de pollos se anotó un triunfo importante, pero como quedó dicho, no reconocido por la FAB.
La entidad, presidida por el Licenciado Luis Romio, un veterano dirigente que, a los 80 años, ha dedicado prácticamente toda su vida a la FAB, tampoco reconoce otras entidades que no sean el WBC, la WBA o IBF y la WBO. De esta forma, Jeremías Ponce, campeón mundial IBO welter junior no es reconocido por el organismo.
Esta actitud, en un momento en que justamente el boxeo argentino no pasa por su mejor momento, tal vez requeriría un cierto aggiornamiento, una manera también de reconocer el esfuerzo y la victoria de Ponce, conducido por Alberto Zacarías.
Lo cierto es que mientras se producen algunos cambios en la Federación –como la designación como vicepresidente de Lautaro Moreno, en reemplazo de un histórico como Osvaldo Bisbal, ejecutivo de AIBA-, el organismo se mantiene a través de la señal televisiva TyC.
Esta señal, que trabaja mancomunadamente con la Federación Argentina, organiza festivales solamente con unos pocos promotores. Uno, el ya mencionado Margossian; el otro, Osvaldo Rivero –histórico manejador de campeones como Látigo Coggi, Julio César Vásquez o Jorge Fernando Castro- y el tercero, de gran crecimiento en los últimos tiempos, Sampson Lewkowicz, uruguayo radicado en los Estados Unidos.
No es todo, porque la Federación Argentina de Box también ha organizado, además, algunos espectáculos profesionales. Un contrasentido, porque significa que la entidad controla y avala los festivales que organiza, siendo juez y parte. De hecho, algunas peleas por títulos argentinos y sudamericanos han mostrado gran disparidad deportiva entre los contendientes, pero se han llevado a cabo igual. Un tema que hace años se viene dando en el boxeo argentino.
En otro orden de cosas, se mantiene expectante la figura de Brian Castaño, 31 años, invicto en 17 peleas con 16 ganadas, 12 antes del límite, y un empate con Erislandy Lara. El ex campeón mundial superwelter de la WBA. Castaño, promocionado por Sebastián Contursi y entrenado por su padre, ha hecho base en los Estados Unidos. Perdió su corona en un trámite oficinesco y ahora aguarda un choque por la corona WBO con el brasileño Patrick Texeira, (31-1-0, 22 KO) programado para el 13 de febrero en Indio, California.
Fernando “Puma” Martínez (12-0-0,7 KO) campeón Plata supermosca del CMB, consagrado en Sudáfrica en diciembre 2019, realizó una dura pelea ante Nicolás “El Rayo” Aquino (7-4-1, 3 KO) a quien venció por puntos, sin título en juego, en el estadio Mary Terán de Weiss de Buenos Aires el viernes 13 de diciembre.
El espectáculo fue televisado por ESPN Knock Out, con los relatos de Renato Bermúdez, los comentarios de Salvador Chava Rodríguez y Carlos Irusta y “La tarjeta de hierro” de Fernando Barbosa, juez internacional del Consejo Mundial de Boxeo. En esa misma velada, Jeremías Ponce (27-0, 17 KO) se anotó una victoria justa pero trabajosa ante Jonathan Eniz (25-14-1, 10 KO), quien lo tuvo por el suelo. Del tema de Chino Maidana Promotions nos ocuparemos más adelante.
Más allá de la muy poca actividad, se afianzaron:
Agustín Gauto, “El Avión”, campeón Internacional minimosca WBO quien a los 22 años, suma 16 peleas todas ganadas, con 11 KO. A fines de año se midió con Juan José Jurado (KOT 1) y Julio Mendoza (KO 2). Muchas condiciones, experiencia internacional –ya peleó y ganó en México y Panamá-, y escasa oposición en sus últimas dos peleas. Obviamente, el tema de la pandemia y la falta de rivales son parte de lo ocurrido.
Lo mismo puede decirse de otro hombre de O. R. Promotions, Gustavo Daniel “El Eléctrico” Lemos, quien a los 24 es campeón Latino IBF super ligero, con un record de 25 (15)-0-0. El 18 de diciembre combatió con el boliviano Jackmani Hurtado (13 (6)-8 (7)-1) a quien venció por KOT 2. Poco rival, muchas esperanzas en él.
Agustín Quintana es otro a tener en cuenta, con 24 años y una marca de 13-1-1, 9 KO, es campeón ligero Fedebol WBA. Lo llaman “Sugar”…
Hay más nombres, por supuesto, incluyendo entre las mujeres a Daniela “La Bonita” Bermúdez (29-3-3, 10 KO) quien a los 31, sumó a su corona gallo WBO, el título IBF super gallo vacante, al vencer a Cintia Gisela Castillo (10-8-0, 1 KO), por puntos.
Para destacar el caso de Nazarena “Capricho” Romero, catamarqueña radicada en Córdoba, con 11-0 (5 KO), campeona super gallo Interina WBA, tras ganarle en dos vueltas a Julieta Cardozo (12-6-0, 1 KO), la gran revelación del boxeo femenino de Argentina.
Uno de los ausentes fue Fabián TNT Maidana, quien no pudo pelear por diversas lesiones. El hermano menor de El Chino, es también una de las principales figuras de Chino Maidana Promotions, encabezada por el ex campeón mundial welter y Acero Cali.
La empresa organizadora montó dos veladas en el último bimestre, televisadas por el equipo de ESPN Knock Out. La idea es seguir trabajando con una base que ya abarca unas veinte figuras, incluyendo a Érica “La Pantera” Farías. Por ahora se presentaron figuras como Jeremías Ponce, Fernando Martínez, o Alejandro “Cuervo” Silva, un misionero de 27 años, quien suma ahora 13 (10-0-0) tras ganar en dura pelea a Javier “La Bestia” Maciel, quien lo tuvo por el suelo. “El Cuervo” Silva es campeón argentino de los superwelters, título que obtuvo a comienzos de 2020 tras vencer a Emiliano Puchetta.
En las filas de Chino Maidana Promotions hay que anotar también a figuras juveniles llenas de futuro como Brian Arregui, campeón de los Juegos Olímpicos para la Juventud 2019, quien hizo su debut rentado. O Francisco “Bebu” Verón (2-0, 2 KO), ex integrante de la Selección Nacional, o Alexis “El Terrible” Torres (2-0,2 KO). Se sumaron, además, Carlos María Alanís Jr o Yoel Peralta, entre otros. Un detalle importante, ya que el boxeo argentino, como todos, necesita de rostros frescos y renovadores.
Alberto “Beto” Palmetta, radicado en Miami, hizo dos peleas en los Estados Unidos, en la Payne Boxing Series. El ex representante olímpico en Rio las ganó ambas y demostró que es un hombre lleno de inquietudes, de ansias de superarse y profesionalismo. A los 30, suma 15 ganadas, 11 antes del límite, una derrota y es el campeón Internacional WBA de los welters.
La gran sorpresa fue la victoria de Franco Morello (2-0-0, 2 KO), por nocaut en el segundo round ante Ezequiel Matthysse (1-1-0, 1 KO), el hijo de Walter y sobrino de Lucas y Soledad, quien está al amparo de Sampson Lewkowicz. Ezequiel estuvo a punto de definir la pelea, hasta que recibió un tremendo cross de contragolpe. Nocaut y a empezar de nuevo. Siempre hay tiempo. Fue en La Calera, Córdoba, 27 de noviembre.
En una pelea de alta vibración, se destaca la victoria por puntos de Marcelo “El Terrible” Cóceres (29-1-1, 15 KO) sobre Sebastián Papeschi (15-3, 6 KO) en Luis Guillón, Buenos Aires, por el campeonato argentino supermediano, el 13 de noviembre. Fallo unánime, que dejó sabor a revancha. A pesar de haber sufrido una caída en el segundo asalto, Papeschi hizo una gran pelea ante un rival de mayor movilidad. Junto a la victoria de Fernando Martínez sobre Nicolás Aquino, de las mejores peleas de un año inevitablemente flaco en espectáculos.
En España, volvió Sergio “Maravilla” Martínez, sumando dos victorias y una esperanza. Las victorias fueron ante José Miguel Fandiño (21 de agosto) y Jussi Koivula (19 de diciembre), ambas antes del límite.
La esperanza tiene que ver con la promesa de Gilbertico Jesús Mendoza de que en 2021 tendrá una chance mundial con el japonés Ryota Murata (16-2-0, 13 KO) campeón mediano de la Asociación Mundial de Boxeo. ¿Sueño difícil de realizar? Para la mayoría, sí, pero no para Martínez, quien a los 45, asegura que hará lo imposible por ser campeón nuevamente. Su última actuación habia sido en el Madison, en junio de 2014, cuando perdió ante Miguel Cotto.
El año nos dejará el recuerdo de dos grandes que se fueron, victimas del corona virus.
Juan Domingo Martillo Roldán, rival de Marvelous Hagler (el único que tuvo oficialmente por el suelo a Marvin) y Thomas Hearns, un pegador tremendo de los medianos que no pudo concretar su sueño de campeón mundial. Tenía 63 años y falleció el 18 de noviembre. “Martillo”, como lo conocían todos, llenó muchas veces el Luna Park. El 30 de abril de 1984 peleó con Marvelous Hagler y le provocó su única caída oficial, pero terminó perdiendo, como luego ocurrió con Tomas Hearns y Michael Nunn. Su record fue de 67 triunfos (47 KO), 5 derrotas y 2 empates.
También partió el ex campeón mundial mediano junior Miguel Angel Castellini el 27 de octubre a los 73. Ganó la corona en Madrid ante José Durán en octubre de 1976; la perdió en su primer defensa ante Eddy Gazo en Managua, Nicaragua. Se retiró con 74 (51)-8-12.
Y de un dirigente como Emilio Graglia (83), histórico representante de la Asociación Mundial de Boxeo, entidad a la que estuvo ligado por dos décadas.
Tal vez haya llegado el momento de que la gente del boxeo argentino (directivos, promotores, entrenadores, ex campeones mundiales, periodistas y, por supuesto, boxeadores en actividad) se reúna alrededor de una mesa para hablar sincera y descarnadamente de este momento. No ha sido solamente la pandemia el problema, puesto que la falta de rumbo viene de hace ya muchos años. Los buenos campeones se reponen de la adversidad. Sería un gran desafío hacer un gran baño de humildad y sin rencores, trabajar todos juntos para el futuro.
De ello dependerá si el boxeo argentino sigue siendo una potencia o si, nostálgicamente, vivirá más de recuerdos que de realidades.