La Otra Mirada: Un golpe con sentimiento

En La Otra Mirada vamos a tratar con cierta regularidad (semanalmente, si se permite) analizar cierta parte del boxeo. Puede ser bueno o malo, algo pequeño o toda la imagen. Pero lo importante es acompañar el día a día del boxeo con otra forma de ver las cosas. Un detenimiento sobre algo particular.

Hoy toca algo bueno, un gran golpe que ayudó a definir una jornada mala en el Mandalay Bay Center. Pero todos sabemos como terminaron las peleas principales. Guillermo Rigondeaux con un  como KO1 que merecía ser NC y Andre Ward con un TKO8 polémico por golpes debajo del cinto a Kovalev.

Pero en esta nota nos vamos a centrar en el golpe que dio origen al nocaut técnico en el octavo asalto. Se lo tiene como boxeador amarrete (por su estilo defensivo) y tramposo (por sus marrullerías) a Andre Ward pero también como un púgil talentoso y el golpe que le da a Sergei Kovalev en la quijada es simplemente incontestable.

Nos detenemos en ese momento, Ward del lado derecho de Kovalev impacta una mano contundente. Sin mediar defensa alguna Kovalev apenas si tambalea -otro ya estaría completamente caído- , el publico estalla en la tribuna y seguro que los que miran en la tele gritan para un lado o para el otro.

Pero nos vamos a otra imagen, la que sacó Lester Silva de Univision. Un Ward conectando con toda su rabia con todo lo que tenia. Como cierra sus ojos, aprieta sus dientes y como descarga su mano sobre la quijada de su rival, que queda sentido con todo el sudor explotando por el ring.

Siempre tuvimos la imagen de un Andre Ward que ganaba con la camiseta, con su talento y con su táctica, pero lo que vimos el sábado por lo menos en ese momento -después fue tristemente empañado por golpes bajos y un arbitro que tenia ganas de irse a su casa rápido- fue un golpe con sentimiento, un golpe con todo. No es algo que se puede ver fácilmente y menos en un boxeador tildado como defensivo.

Originally posted 2017-06-22 00:40:10.