Luis Ángel Firpo, «El toro salvaje de las pampas»

Por La Verdad Online

Plasmar en dos páginas, las notas publicadas a lo largo de décadas, sobre la vida de uno de los mejores deportistas de todos los tiempos, juninense por cierto, resulta imposible.
De todas formas, hay momentos en la carrera deportiva de Luis Ángel Firpo, que bien vale la pena volcar en este recuerdo.

Comenzando, por qué no, allá por el año 1922.
Llegaba abril de 1922 cuando el nombre de Luis Ángel Firpo quedaba plasmado en medios del mundo, tras adjudicarse el campeonato de Nueva Jersey en el peso pesado.
Así, lo sostenían en Diario La Verdad. “No han de ser quizás infundadas las esperanzas de Firpo al intentar la conquista del cetro mundial del pugilismo.

Su actuación en Estados Unidos, notablemente iniciada en el match con Maxted en que venciera por knockout (sic) en el 7° round, acaba de confirmas las cualidades que posee, las que lo hacen destacar en el mundo del box, con la espléndida victoria que obtuviera el martes sobre Mac Cann, campeón de peso pesado de nueva Jersey.

La carrera del pugilista argentino, al obtener el honroso (sic) título de campeón en donde tiene su asiento lo más destacado del ambiente pugilístico, es un galardón que agrega a su brillante foja, y si Firpo conoce el entusiasmo que despiertan sus hechos en su pueblo, han de constituir un fuerte aliciente y un estímulo valioso para proseguir su carrera triunfal y traer a Sud América nuevos laureles conquistados por el esfuerzo de sus hijos.

” alt=”” aria-hidden=”true” />

De izquierda a derecha, en primera fila, Abel Laudonio, Alfredo Prada, Oscar casanovas y Saúl Rousadonsquey. Abajo, en el mismo orden: Héctor Giubbilini, Luis Federico Thompson, Rolando Caballero y Francisco Mancuso.

Junín orgulloso
El pueblo de Junín, cuna de Firpo cuya figura se engrandece al paso de sus triunfos, se siente orgulloso porque su humilde nombre de pueblo de provincia ha llegado a despertar en la más soberbia de las naciones, admiración, porque las glorias que conquista Firpo, han de ser gloriosas para Junín.

En el mes de mayo de 1922, aparece publicada en las páginas del diario La verdad, la noticia que anunciaba “Oferta para un match Firpo Dempsey- Contestando a un mensaje dirigido por la United Press a Jack Dempsey que se halla en viaje de regreso, a bordo del Aquitania, el manager del boxeador, Jack Kearns, envío un despacho por telefonía sin hilos, diciendo que habían recibido de la América del Sur, una oferta de 1.000.000 de pesos para un combate entre Dempsey y Firpo, que se realizaría en Buenos Aires y que, a su llegada a Estados Unidos, considerarían la propuesta si el ofrecimiento es “bona fide”.

Ese mismo año, La Verdad refleja en un cable procedente de los Estados Unidos, que “Las películas del match entre Firpo y Hermann serán enviadas hoy a Buenos Aires -15 de mayo-, a bordo del vapor Couthern Cross, que sale el 21 del corriente. Firpo se ha reservado los derechos exclusivos de estas películas.
Las ganancias de Firpo en el pasado no han sido de consideración, pero su situación en adelante cambiará notablemente.

” alt=”” aria-hidden=”true” />

La pelea del siglo
Pegando un salto en el tiempo, y transcurridos 50 años de la pelea del siglo, se refresca la llamada pelea del siglo, entre el púgil juninense y Jack Dempsey.

“Jack Dempsey venía de derrotar por puntos en lo que para muchos había sido decepcionante, a Tom Gibbons. Auténtica máquina de picar carne. Dempsey pertenecía a esa raza de boxeadores que suben al ring para matar o morir y el resultado del combate con Gibbons sin nockout fue entonces fue decepción. Esa pelea había tenido lugar el 4 de julio de 1923 y parecía que el matador de “Manasia” se había quedado sin rivales.
Pero cuando Luis Ángel Firpo derrota al ex campeón mundial Jess Willard en su frustrado intento de recuperar la corona, el enfrentamiento se hace inevitable.

Probablemente nunca se habían enfrentado sobre el ring dos temperamentos pugilísticos tan similares. Firpo era de la estirpe que Dempsey, quizás más reconcentrado e introvertido.

Cuentan que apenas llegado a Estados Unidos precedido por varias victorias por la vía rápida, obtenidas en Sudamérica, debió efectuar un match de exhibición ante promotores yanquis, con protector y grandes guantes de entrenamiento resultando poco menos que una decepción para los espectadores. Es que el estilo de Firpo no conocía de florituras o alardes técnicos ni brillaba, por consecuencia, en entrenamientos. Pero arriba del cuadrilátero era un verdadero remolino de golpes de ambas manos que no cesaban hasta que el adversario estaba en la lona.
Firpo recordará después que el día de su combate con Dempsey uno de sus brazos no podía dar el máximo alcance. Habiéndose visto obligado a librar un número sucesivo de peleas, no subió en su mejor forma al ring de Polo Grounds, aquel 14 de septiembre de 1923.

La pelea iba a provocar un número de polémicas grandes que aún hoy no se han acabado. El más grande crítico pugilístico, Nat Flaischer ha dicho “Si el sudamericano llega a poseer más técnica, hubiera podido ganar aquella vez el campeonato. Ambos contendientes recibieron terribles puñetazos antes de que Firpo cayera fuera de combate. Un uppercaut terminó la contienda en el segundo round. Pero durante aquellos tres minutos y cincuenta y siete segundos de batalla hubo mucha más actividad en el ring de la que puede verse generalmente en quince asaltos, en un combate para el título. En aquellos escasos minutos de incesante lucha, Dempsey fue lanzado del ring por su antagonista, y si no llega a ser ayudado por las manos amigas de los periodistas, quizás hubiera llegado demasiado tarde a reintegrarse a la pelea.

Por segunda vez cayó de rodillas Dempsey, poco antes de dar a Firpo el puñetazo definitivo. Firpo dio pruebas de un magnífico coraje. Destrozado y lleno de sangre, borracho por el terrible bombardeo de puñetazos, Firpo seguía atacando con tenacidad. El combate fue el más dramático en la historia del boxeo de los pesos pesados.
El propio Dempsey admitiría años más tarde que había perdido y que el verdadero ganador era el “Toro salvaje de las pampas”. Pero derrotado, Firpo dio muestras de un coraje que como se ve no le niegan ni los propios críticos norteamericanos. A los 50 años del combate, Luis Ángel Firpo, que no ganó el título, sigue siendo recordado como protagonista de la pelea del siglo (C.P.A.).

” alt=”” aria-hidden=”true” />

La delegación boxística en la Municipalidad. De izquierda a derecha: Manuel Sela (presidente del Concejo Deliberante), Alfredo Prada. Dr. Luis Venini, Oscar Casanovas, Alberto Balparda, Luis Thompson,

SU MUERTE

La inesperada llegaba la noticia de la desaparición física del hijo de Junín. Había fallecido Luis Ángel Firpo, el “Toro de las pampas”, quien había nacido en Junín hace 66 años.

La crónica decía que “A la edad de 66 años falleció en esta mañana en Capital Federal, Luis Ángel Firpo, el otrora gran boxeador de peso pesado que conquistara en 1920 el campeonato Sud Americano y que en 1922 enfrentó al campeón mundial Jack Dempsey, match que ha quedado en el historial boxístico como uno de los más sensacionales. Su paso por los rings del país de los rascacielos, le valió a Firpo el mote de “El toro salvaje de las pampas”, creado por los aficionados norteamericanos por su modalidad de peleador y gran espíritu de lucha. Firpo había nacido en la ciudad bonaerense de Junín, el 2 de octubre de 1894 y cuando se retiró del boxeo por el avance del tiempo, se dedicó a la ganadería. Era propietario de varios establecimientos ubicados en la provincia de Buenos Aires. El sufrió un síncope cardíaco y su fallecimiento sobrevino.

Los restos de Luis Ángel Firpo serán llevados mañana a las 11 al Luna Park, donde permanecerán entre profesionales y amigos del boxeo hasta las 16. A esa hora serán trasladados al Cementerio de la Recoleta para su inhumación.
.Firpo murió sin que su esposa, que estaba a su lado, alcanzara a administrarle oxígeno que siempre tenía en su habitación desde que hace cuatro años sufriera un infarto. Cuando se produjo el desenlace, Firpo se encontraba recostado en la cama, bastante fatigado, aunque la jornada anterior había sido el habitual.

La sepultura
En el Cementerio de la Recoleta fueron inhumados los restos del famoso boxeador argentino Luis Ángel Firpo. Crecida cantidad de público acompañó los despojos del deportista hasta su última morada, desde el Luna Park, donde fueron velados.

En la Recoleta despidieron a Firpo el presidente de la Federación Argentina de Box, señor José Oriani, José Morales del Luna Park, Luis Benedicto del Círculo de Cronistas Deportivos y Carlos Escudero por los árbitros de box.
Alrededor de las 16 el féretro fue retirado del Luna Park entre la multitud.
Dificultosamente fue colocado el ataúd, que se puso en marcha sobre la Avenida Corrientes. Al llegar frente al obelisco, donde estuvo primitivamente el Luna Park, se detuvo un minuto el cortejo y lo mismo ocurrió ante la confitería Real, de la que Firpo fue asiduo concurrente.

Otra alternativa se produjo en Corrientes y Talcahuano, donde un grupo de jóvenes tomó una bandera nacional que les fue facilitada por un comerciante del lugar y la ubicaron sobre el féretro. Al llegar a la necrópolis la multitud era muy numerosa y asistió acongojada a la inhumación de los restos en la bóveda familiar.

HOMENAJES
No fueron pocos los homenajes que su ciudad rindió a uno de sus mejores deportistas.
Entre ellos, la ordenanza sancionada por el Concejo Deliberante y el acto presidido, en 1973 por el entonces intendente Oscar Venini. Los hechos quedaron reflejados en las páginas de este matutino centenario.

El Concejo Deliberante del Partido de Junín, en homenaje a Luis Ángel Firpo, que había nacido en nuestra ciudad, en la sesión del día 22 de agosto último, acordó y sancionó la ordenanza que transcribimos a continuación “A partir del día 14 de septiembre de 1973, designase con el nombre de Luis Ángel Firpo a la calle que nace a la altura del 900 de la Avda. Dr. Benito de Miguel y corre paralela a Rvdo. Padre Rojo Vesgas, hasta la Avda. de Circunvalación”.
Los actos de homenaje a realizarse mañana contarán con la visita de numerosos representantes, que serán recibidos en su despacho por el intendente municipal Dr. Luis Oscar Venini.

Se ha informado que estarán presentes las siguientes delegaciones y nombres vinculados al deporte. Gente de Box de Pergamino; Rodriguez Jurado, campeón Olímpico 1928; Santiago Montardi y Ernesto Piraccini, Damián Cané, Ulises Barrera, Oscar Casanova, Alfredo Prada, Icaro Frusca, Fortunato Firpo, Abel Laudonio, Iran Núñez, Balparda, Arquitecto Mihanovich, representante de la Federación Argentina de Box, Dr. Iñurriegarro, y Juan Colombo. Y representantes de la Comisión Municipal de Box. En el acto se descubrirá una placa ofrecida por la delegación de box de Pergamino.
Anoche un directivo de la Asociación Juninense de Box, nos comunicó que fueron totalmente agotadas las tarjetas para la reunión social, que en adhesión al Día del Boxeador, se llevará a cabo en el Club Ciclista.

LOS ACTOS
Tal como estaba previsto, se cumplieron en la mañana de ayer en nuestra ciudad, los actos de homenaje al legendario boxeador juninense, Luis Ángel Firpo. Los mismos que contaron con la presencia de distintas personalidades del mundo pugilístico tuvieron también la adhesión de la prensa capitalina, representada por Ulises Barrera y Damián Cané, la pergaminense y por supuesto los representantes de distintos medios locales.

Tras el recibimiento en la Municipalidad, se trasladaron hasta la Avenida Bto. de Miguel al 900, donde en forma perpendicular a la mencionada arteria y paralela a la denominada Reverendo Padre Rojo Vesgas, se halla de ahora en más, la denominada Luis Ángel Firpo. Allí se erigió un monolito, que exhibe las plaquetas recordatorias del acto. Usaron de la palabra el Dr. Luis O. Venini, Aldo Carrizo (Agrupación Juninense de Box) y Santiago Montardit (Gente de Box de Pergamino).
Posteriormente, en calle Lavalle 212, donde se halla actualmente un solar abandonado, la delegación Pergaminense dejó en manos del Intendente Municipal, una plaqueta en custodia y usó de la palabra el colega Pergaminense Ernesto Piraccini.
Estos actos contaron con la adhesión de los aficionados locales, que tuvieron ocasión de alternar con figuras tan queridas y recordadas como Oscar Casanovas, Alfredo Prada, Luis Federico Thompson, Abel Laudonio, Fernando Bello (ex guardavalla de Independiente), Hiran Núñez y Alberto Balparda (árbitros de primera categoría en el Luna Park) y otras figuras de no menos predicamento. Todo esto culminó anoche en el Club Ciclista Juninense, donde se homenajeó al ex púgil Julio Ferro y al colega José Buono, procediéndose también a la elección de la Reina del boxeo de Junín, con gran asistencia de comensales.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *